Investigadores y científicos de toda Europa están colaborando para desarrollar aplicaciones que puedan rastrear la propagación de el coronavirus sin violar las estrictas regulaciones de privacidad de la UE.
La iniciativa Pan-European Privacy Preserving Proximity Tracing (PEPP-PT) anunció el miércoles que estaba lanzando un código para una aplicación que cree que permitirá el rastreo de contactos, sin dejar de cumplir con el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR). Como parte de la iniciativa, 130 académicos de ocho países trabajaron en el código, que analizará los pings de Bluetooth entre dispositivos para rastrear con quién entró en contacto la gente.
El seguimiento de contactos es un método común para prevenir la propagación de enfermedades y anteriormente se usaba, por ejemplo, para controlar los brotes de ébola. El objetivo es identificar a las personas que han entrado en contacto con cualquier persona que se haya confirmado que tiene una infección o un virus, para que se les pueda informar que deben aislarse si también han sido infectados. La capacidad de hacer saber a las personas cuándo necesitan aislarse puede reducir potencialmente su dependencia de las condiciones generales de bloqueo, lo que permite a la población en general disfrutar de una mayor libertad de movimiento que en la actualidad en la mayoría de los lugares del mundo.
En el pasado, el seguimiento de contactos se realizaba a través de entrevistas con los pacientes, pero las funciones de seguimiento de la tecnología tienen el potencial de hacer la tarea mucho más fácil y precisa. La desventaja es que registrar dónde han estado las personas y con quién han entrado en contacto puede contar como vigilancia y violar las leyes de privacidad.
El equipo europeo de PEPP-PT cree que su método descentralizado, a través del cual las personas usan señales de Bluetooth para grabar en sus teléfonos con quienes han contactado localmente, no causará tales problemas de privacidad. Posteriormente se informará a los usuarios a través de la aplicación en sus propios teléfonos si han estado cerca de alguien con confirmación de tener el coronavirus, utilizando apodos que se cambiarán con frecuencia.
O El Reino Unido está trabajando en su propia aplicación similar, que planea publicar justo antes o inmediatamente después de que se levanten las restricciones de bloqueo actuales. Según Politico, Alemania debería ser el primer país en lanzar una aplicación basada en el código PEPP-PT.
Si se implementan con éxito y se descargan ampliamente, estas aplicaciones pueden ayudar a contener futuros brotes del coronavirus una vez que haya pasado la crisis actual.
aplicaciones móviles de ciencia y tecnología de privacidad de coronavirus