Después de meses de dolores de cabeza, un bar en Tokio solucionó el problema de encontrar un bartender utilizando una alternativa totalmente automatizada: un bartender eléctrico puede servir cerveza en 40 segundos, preparar un cóctel en menos de un minuto, especialmente capaz de trabajar sin descanso y sin Pide un aumento.
Este bar, llamado Zeroken Robo Tavern, está ubicado en el área de la estación Ikebukuro de Tokio. Con la reciente aparición del robot bartender, casi todo el proceso de servicio en la tienda se ha automatizado. Los clientes primero ordenarán sus bebidas a través de una pantalla táctil ubicada en el quiosco y pagarán. Los recibos se imprimirán automáticamente, con un código QR desechable en su interior. Luego, los clientes solo tienen el recibo en el área del robot distribuidor. El robot escaneará el código QR del recibo e inmediatamente preparará la bebida correspondiente y se la enviará de vuelta al cliente.
A continuación se muestra un video de todo el proceso de servicio automatizado en Zeroken Robo Tavern:
Está claro que este robot, incluso con tecnología avanzada de inteligencia artificial, no tendrá la capacidad de comunicarse con los clientes con la flexibilidad de un ser humano de carne y hueso. Sin embargo, todavía admite muchas funciones interactivas inteligentes, como imágenes de rostros sonrientes al escanear códigos de pedido de clientes, hablar con ellos sobre el clima y, especialmente, está equipado con la capacidad de analizar expresiones. Toque el rostro del cliente para realizar las frases de comunicación adecuadas.
Como ser humano, este bartender tendrá que pasar por un proceso de prueba de 2 meses para evaluar el desempeño y especialmente los comentarios de los clientes.
El robot cuesta unos 9 millones de yenes (82.000 dólares), lo que equivale a contratar a un barman durante tres años. Y si lo “aceptan” para trabajar, ayudará a resolver el problema de la falta de personal durante muchos años.
El envejecimiento y el declive de la población japonesa ha significado que el país carece de un número significativo de trabajadores jóvenes, especialmente en el sector de servicios. Esta es también la razón por la que este país se convierte en un “paraíso” para los robots.
Inteligencia artificial AI
Después de meses de dolores de cabeza, un bar en Tokio solucionó el problema de encontrar un bartender utilizando una alternativa totalmente automatizada: un bartender eléctrico puede servir cerveza en 40 segundos, preparar un cóctel en menos de un minuto, especialmente capaz de trabajar sin descanso y sin Pide un aumento.
Este bar, llamado Zeroken Robo Tavern, está ubicado en el área de la estación Ikebukuro de Tokio. Con la reciente aparición del robot bartender, casi todo el proceso de servicio en la tienda se ha automatizado. Los clientes primero ordenarán sus bebidas a través de una pantalla táctil ubicada en el quiosco y pagarán. Los recibos se imprimirán automáticamente, con un código QR desechable en su interior. Luego, los clientes solo tienen el recibo en el área del robot distribuidor. El robot escaneará el código QR del recibo e inmediatamente preparará la bebida correspondiente y se la enviará de vuelta al cliente.
A continuación se muestra un video de todo el proceso de servicio automatizado en Zeroken Robo Tavern:
Está claro que este robot, incluso con tecnología avanzada de inteligencia artificial, no tendrá la capacidad de comunicarse con los clientes con la flexibilidad de un ser humano de carne y hueso. Sin embargo, todavía admite muchas funciones interactivas inteligentes, como imágenes de rostros sonrientes al escanear códigos de pedido de clientes, hablar con ellos sobre el clima y, especialmente, está equipado con la capacidad de analizar expresiones. Toque el rostro del cliente para realizar las frases de comunicación adecuadas.
Como ser humano, este bartender tendrá que pasar por un proceso de prueba de 2 meses para evaluar el desempeño y especialmente los comentarios de los clientes.
El robot cuesta unos 9 millones de yenes (82.000 dólares), lo que equivale a contratar a un barman durante tres años. Y si lo “aceptan” para trabajar, ayudará a resolver el problema de la falta de personal durante muchos años.
El envejecimiento y el declive de la población japonesa ha significado que el país carece de un número significativo de trabajadores jóvenes, especialmente en el sector de servicios. Esta es también la razón por la que este país se convierte en un “paraíso” para los robots.