Método 1 de 2:
Elegir y ajustar tu bicicleta
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Consíguete un bicicleta gorda si andas a menudo por la arena. Las bicicletas gordas tienen neumáticos de 4 pulgadas. (10 cm) en llantas de 26 pulgadas. (66 cm). Son la mejor opción para pedalear en la arena, por lo que si te gusta caminar por la playa o enfrentarte a las dunas de arena, invertir en una fat bike es una decisión acertada.[1]
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Opte por neumáticos anchos. Los neumáticos más anchos permiten un mayor contacto con la superficie del suelo, facilitando el equilibrio de la bicicleta. Para obtener mejores resultados, utilice neumáticos de entre 4,4 y 6,4 cm (1,75 y 2,50 pulgadas) de ancho. La arena suelta requiere un soporte aún más robusto.[2]
- El diámetro de la llanta limita las opciones de ancho del neumático. Si camina sobre la arena con frecuencia y el cuadro de su bicicleta lo soporta, considere cambiar a un neumático más ancho.
- El uso de neumáticos anchos afecta el rendimiento en superficies duras. Si está caminando por un sendero con condiciones mixtas, tendrá que ceder.
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Utilice una presión de neumáticos más baja. Dejar salir un poco de aire de los neumáticos puede facilitar la conducción en la arena. Cuando una mayor parte de su neumático esté en contacto con la arena, será menos difícil pedalear y conducir la bicicleta.[3]
- Si tiene una bicicleta gruesa, puede bajar de 4 a 6 psi.[4] Para una bicicleta de montaña, baje el psi a 18-20.[5]
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Mantenga las marchas bajas. Los engranajes más bajos producen más torque, lo que reduce la posibilidad de que la rueda trasera se atasque en la arena. Esto puede ser frustrante en combinación con neumáticos más gruesos, pero necesita ese impulso adicional para permanecer en la superficie.[6]
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Minimice los cambios y el frenado en la arena. Cambiar de marcha y frenar te ralentizará y hundirá las ruedas en la arena, matando tu ritmo. Planifique con anticipación y cambie de marcha mientras aún se encuentra en tierra firme.[7]
- Puedes cambiar al bajar por una pendiente arenosa, ya que tendrás suficiente velocidad para llevarla. Asegúrese de estar en una marcha para pedalear fácilmente cuando llegue a un terreno plano.
Método 2 de 2:
Cambiar su enfoque de conducción
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Trate de montar sobre arena mojada o finas capas de arena sobre suelo compactado. Si eres nuevo en la conducción sobre arena, trata de mantenerte alejado de la arena suelta, lo que reducirá tu velocidad y dificultará la conducción. Sin embargo, caminar sobre arena mojada o una fina capa de arena sobre suelo duro es similar a caminar sobre césped ligeramente mojado.[8]
- Las pendientes pronunciadas son especialmente difíciles. Manténgase alejado de ellos hasta que se sienta más cómodo.
- Si andas en bicicleta en la playa, mantente cerca del agua, pero fuera del alcance del agua. Tendrá más espacio para maniobrar durante la marea baja.
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Inclínese ligeramente hacia atrás. Resista la tentación de apoyarse en la rueda delantera. Esto te llevará a la arena, ralentizándote o interrumpiendo tu curso. En su lugar, siéntese en el sillín y mantenga su peso centrado en la parte trasera de la bicicleta.[9]
- Al caminar por las dunas, incluso puede tirar un poco del manillar.
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Pedalea con fuerza constante. No conduzca en ráfagas cortas e irregulares, o el cambio de velocidad puede hacer que la rueda trasera resbale y se hunda en la arena. Encuentre una cadencia que funcione para usted y manténgala hasta que cambie la pendiente.[10]
- Conduzca más despacio de lo que lo haría normalmente, especialmente si es principiante. Es fácil perder el control sobre la arena y no querrás salirte del manillar.
- Si estás en un terreno duro y ves que se eleva un pequeño trozo de arena, la velocidad de acumulación puede ayudarte a atravesarlo. No olvide quitar el peso de la rueda delantera al acercarse.
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Cambie la dirección usando contrapresión. No podrá andar en bicicleta de la misma manera que lo haría normalmente en una superficie pavimentada o sucia. Cuando camine sobre la arena, incline gradualmente su cuerpo y use la contrapresión para girar la bicicleta.
- Si gira el neumático rápidamente, se hundirá en la arena.[11]
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relajarse. La arena suelta hace que el viaje sea desigual y desigual. Mantenga su cuerpo relajado para absorber los golpes y mantener el control. Utilice también un toque ligero en el manillar.[12]
bicicleta de investigación de fuente de arena